La visita introductoria en odontopediatría nos sirve para familiarizar al niño con la clínica de odontología pediátrica.
En Odontopediatría existe una visita llamada “visita introductoria”. Esta consta de una consulta preliminar y de observación, generalmente luego de la primera visita, en donde se le realiza al niño un procedimiento simple como puede ser una profilaxis dental, que permite una progresiva familiarización con el ambiente de manera agradable y le permite al dentista obtener más información acerca de la colaboración de su paciente.
Para que las visitas sean efectivas y generen confianza y seguridad en los pacientes, el odontólogo de niños tendrá que adaptarse a cada nueva situación, ya que las conductas de los niños son impredecibles.
Debemos tener en cuenta que, en ocasiones, esta visita puede ser más difícil si los niños están muy preocupados por un dolor o algún tipo de problema del que temen su tratamiento. Son muchísimos los niños que llegan por primera vez con un miedo muy grande, y sin embargo, van perdiendo dicho miedo paulatinamente, y este proceso comienza con la visita introductoria.
Siempre que sea posible, debemos instar a que nuestros hijos no sólo asistan al odontólogo de niños (odontopediatra) por algún dolor o problema. Conviene implementar una rutina de cuidado oral. Realizamos la visita introductoria, para que el avance en la consulta sea progresivo, de menor a mayor dificultad, y así tener una experiencia agradable, que facilite el resto de cuidados dentales a lo largo de su infancia y adolescencia. Un niño y un adolescente que tienen muy buenos cuidados dentales y tienen un programa de prevención y flúor establecido, dificilmente no continuarán con dicho patrón y costumbres cuando lleguen a la edad adulta para mantener muy buena salud oral.
Referencia: Boj JR, Catalá M, Mendoza A, Planells P, Cortés O. Odontopediatría: Bebés, Niños y Adolescentes. 1ª Edición. 2019. España.
